Seguimos nuevamente por la NA-132 hasta llegar la cruce a la derecha que enlaza con la NA-5320, a partir de aquí una sinuosa carretera durante 5 Kms. nos sube hasta
GALLIPIENZO.
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Al igual que Santa Elena en Abaiz, en San Salvador de Gallipienzo son patentes sus características de iglesia-fortaleza. Sancho III el Mayor asigno las rentas de la villa a su hijo Ramiro hacia 1035, aunque parece que, ya en el siglo X, era una de las
tenencias del reino. En 1119 Alfonso el Batallador concedió a sus habitantes el fuero de Sobrarbe. En la Edad Media llegó a alcanzar los 60 fuegos, figurando como villa de señorío realengo ya en 1237.
Tenemos que coger aire y ascender paseando por las empinadas calles medievales hasta la iglesia de San Salvador, actualmente sin culto, en la que visitamos su cripta de estilo románico tardío (c. 1200)
construida para salvar el importante desnivel que existe y sobre la que descansa la cabecera de la iglesia gótica.
Construida con enormes y bien escuadrado sillares, estaba bajo la advocación de Santa Margarita. Al exterior se manifiesta con una imposta, -que en el interior se traduce en el arranque de la bóveda de crucería
simple-y una hermosa ventana de arco de medio punto con baquetón sobre columnas, con capiteles vegetales y cabecitas humanas, por encima, una arquivolta de gruesas puntas de diamante.
El acceso al interior, que se efectúa por el lado sur, lo hacemos por una portada adintelada abierta junto a la cabecera de la iglesia, donde nos obsequian la vista con una puerta metálica cortafuegos moderna, cuyo fin no logro entender, ya que no hay nada que
llevarse de dentro. En el interior encontramos tirada la antigua de madera.
El recinto muy alto y estrecho está totalmente cubierto de pintura, que según se indica en una inscripción, se efectuó en el año 1572. La planta tiene un corto tramo recto donde se
abre la portada y desde la que hay que bajar unas empinadas escaleras de piedra. A través de una arco fajón, que descansa en dobles columnas
con capiteles tallados con roleos pasamos al ábside semicircular que como hemos dicho está cubierto por bóveda de horno con crucería simple,
cuyos nervios descansan en pequeñas columnas con capiteles similares a los del arco de triunfo.
Además de la ventana axial de medio punto muy abocinada con una arquivolta sobre columnillas con capiteles decorados con roleos y vegetales, existen a cada lado unos vanos ciegos
a modo de credencias, también de riguroso medio punto